En redes sociales ha circulado el video de una sicaria que fue eliminada por la población tras haber asesinado a un conductor de transporte público, caso que correspondería al de Bedelyn Esther Orozco Gómez, una adolescente de 14 años que murió a manos de una multitud de personas al haber sido parte del atentado.

Dicho caso se registró el 7 de diciembre de 2014 en Nueva Santa Rosa, municipio del departamento de Santa Rosa, en Guatemala, cuando una turba de mototaxistas señaló a la joven, que estaba a días de cumplir 15 años, de haber asesinado a Sirio Neftaly Quevedo García, un conductor del mismo rubro, por presunta extorsión.

Es así que esta multitud tomó justicia por sus propias manos y capturó a la menor de edad, a quien arrastraron, abofetearon, patearon y le rociaron gasolina para prenderla en fuego.

Por lo anterior, Gómez fue trasladada al Hospital Regional de Cuilapa, en Santa Rosa, donde falleció tras cinco días en cuidados intensivos por una infección que surgió luego de que el tejido muerto se extendiera por sus extremidades, sus pulmones se llenaran de líquido y su corazón no resistiera, explicó Julio Samayoa, uno de los médicos que la trató.

Sicaria eliminada por población video

El video de Bedelyn Esther Orozco Gómez se ha vuelto viral, a casi 10 años del hecho, debido a que usuarios han dado a conocer el caso en TikTok.

Con respecto al caso, Geocel Eunice Gómez, madre de la menor, reveló que su hija le había contado que un hombre privado de su libertad le ordenó que cometiera los ataques armados y, de lo contrario, la matarían a ella.

Sin embargo, el Ministerio Público descartó que había sido la adolescente quien disparó el arma, lo cual habría realizado un presunto pandillero como ‘El Iguana’, también menor de edad.

Por otro lado, por la muerte de Bedelyn Esther Orozco Gómez solamente se capturó a Gregorio Gutiérrez Lima, acusado de arrojarle gasolina a la adolescente.

Debido a ello, las autoridades lo enviaron a prisión preventiva por un intento de asesinato en circunstancias agravantes; no obstante, el hombre logró el cambio de delito a homicidio en estado de emoción violenta, por lo que logró un cama medida sustitutiva.

Es así que, a casi una década del hecho, nadie fue condenado y el caso terminó en impunidad para los participantes.