Han pasado casi cuatro años desde el fallecimiento de Belén San Román, la joven policía que decidió quitarse la vida tras la viralización de un video íntimo suyo en Bragado, Argentina. El material fue difundido por un hombre con el que mantenía una relación. Se ha anunciado que el juicio comenzará el 2 de diciembre de 2027.

Marcelo, padre de Belén, expresó al portal TN su esperanza de que los jueces estén a la altura del caso. También pidió que esta causa marque un precedente importante en la historia de la justicia argentina, destacando la gravedad del asunto.

En cuanto al acusado, Tobías Villarruel, San Román subrayó que llegará detenido al juicio. Villarruel, quien ya estaba preso por robo cuando comenzó su relación con Belén en redes sociales, recuperó la libertad el año pasado, pero fue arrestado nuevamente al mes siguiente por otro delito

Trágico final de Belén San Román, tras video filtrado

El 30 de noviembre de 2020, Belén San Román envió un mensaje a su jefa del Comando de Prevención Rural disculpándose por lo que estaba a punto de hacer. También dejó una carta en la que pedía perdón a sus hijos y familia antes de dispararse en la cabeza.

Sus compañeros, alertados por el mensaje, se dirigieron rápidamente a su domicilio en un patrullero. Sin embargo, no pudieron evitar la tragedia; escucharon el disparo desde la calle y la llevaron de urgencia al hospital municipal San Luis, donde falleció tras cuatro días de agonía.

“Nunca pensé que mi hija se quitaría la vida. No puedo entenderlo”, expresó su padre a los medios en ese momento. La tragedia impactó profundamente a su familia y a sus colegas.

Una relación en redes que terminó en traición

Belén trabajaba en el Comando de Patrulla Rural de Bragado, mientras que Tobías Villarruel ya llevaba dos años preso por robar una panadería. Se conocieron a través de las redes sociales, y aunque su entorno no veía con buenos ojos la relación, ella decidió confiar y darle una oportunidad.

Sin embargo, nunca llegaron a conocerse en persona. Tuvieron algunos encuentros virtuales antes de que Belén decidiera poner fin a la relación. Fue entonces cuando comenzó su pesadilla. Villarruel grabó una videollamada sin su consentimiento y usó esas imágenes para extorsionarla tras la ruptura.

A partir de ese momento, Villarruel empezó a hostigarla y amenazarla, exigiéndole dinero para no difundir el video íntimo. San Román, el padre de Belén, relató en una entrevista que su hija hizo todo lo posible por detenerlo, incluso vendió su auto, pero no logró evitar la difusión del material.